
Para mí, la vida adulta es más divertida que la niñez – Active Mom

Para mí, la vida adulta es en realidad más divertida que la niñez.
No me avergüenzo de admitirlo. Hacía tiempo que no escribía más cosas personales por aquí. Así que es hora :))
La inspiración comenzó a partir de un comentario en mi publicación sobre «And Just Like That». No vi Sex and the City (los protagonistas me parecieron totalmente desagradables). Pero dije que le diera una oportunidad a la serie que continúa la historia de los personajes que han llegado a los 55 años. De todos modos, Me quejaba de que gemí en los primeros 2 episodios a pesar de que esperaba que fueran más relajantes y divertidos. Y alguien me dijo que esperábamos ser adultos para ser divertida, así es como en la vida. De repente, me di cuenta de que ser adulto es más divertido para mí.
Vale, ahora hay muchas más responsabilidades, muy poca energía para lo que me gustaría hacer, muy poco tiempo y cuerpo, bien, ya no tiene tanto poder de regeneración. No es que yo fuera adaptar nunca, pero de todos modos :)) Además, algunos de mis seres queridos ya no están aquí. Sí, son cosas que no son divertidas, pero son parte del ciclo de la vida.
Por otro lado, ser adulto tiene muchos más beneficios:
- Miro todo con infinitamente más desapego
- Me doy cuenta mucho más claramente de quién soy y de lo que quiero.
- es más fácil para mí decir lo que pienso, no tengo tanto miedo al juicio
- cuando me divierto con personas con las que me siento bien, realmente lo hago
- que mi hija crezca un poco mas y yo pueda salir sin pedir permiso para llegar tarde :)) (es decir ella se va a poder quedar sola en casa, no tengo que asegurarme de que tenga con quien quedarse ella, será suficiente para ad)
- Siento aprecio por mi trabajo, por lo que hago y digo
- Puedo elegir lo que me gusta hacer (tanto aficiones como profesionalmente)
- Veo los resultados claros de mis esfuerzos (a diferencia de todos los años escolares cuando no entendía por qué estaba luchando y por qué necesitaba el 70% de la información que de todos modos olvidé mientras crecía)
- Entiendo mis reacciones, y a veces hasta manejo mis emociones (sin reprimirlas tanto que luego salgan). Ok, esto es una posibilidad remota, pero estoy en el camino correcto :))
- Yo decido lo que me gusta leer (no tengo una bibliografía impuesta, como en las clases de rumano 😀)
- De hecho, me doy cuenta de que estoy evolucionando de una situación a otra. Esto, además de ser divertido, es muy bueno para el barrio.
- No me avergüenza admitir cuando estoy pasando por un momento difícil, tomar un descanso o pedir ayuda. Es una gran cosa.
- Entiendo que no es una tragedia si algo no me sale bien (de lo primero, de lo segundo…)
- si tengo frío, estoy acurrucado, ¿y si parezco un vestidor? (Esto es para mi mamá, que estaba atrapada en cómo, cuando era adolescente, me quitaba el sombrero cuando salía de casa, porque pensaba que no era genial)
- Tengo ganas de hacer el tonto o jugar, lo hago, sin tomarme demasiado en serio.
¿Cómo se compara la vida adulta con su niñez o adolescencia?
Foto bohemia Foto de Iuliana Olteanu